Por : Miroslava H. Mendoza
Hechizó mi piel y ahora es una completa adicta a su recuerdo
Las memorias de cada uno de sus besos me persiguen.
Atrapada, nostálgica, mi alma perdida en el laberinto de su magia.
Busqué un remedio para el encanto de sus besos, pero me besó el alma con tan solo una mirada
Abría ventanas dentro de mí que desconocía
Inmutada, callada, serena después de que el viento consumió su recuerdo con sus brisas de verano
Adicta completamente adicta
Enloquecida, mi alma agoniza y alucina su recuerdo
Sus ojos hicieron vibrar a mi alma, una sensación como ninguna otra
Dejó en mi corazón cicatrices que forman constelaciones
Su inexplicable magia hace del dolor maravillas
Se convirtió en un vicio y mi alma se transformó en una antología de poesías,
Con el roce de su esencia, de su magia tan suya, tan mía.
Adicta mi alma, completamente adicta se ha vuelto a su recuerdo.
Y ahora que somos dos perfectos extraños
Solo le queda a mi alma regalarle unos versos.
Tan bello y profundo como todo lo que escribes
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Cada vez más poética. Hermosas metáforas. Sigue adelante.
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